Consejos útiles para quienes se reincorporan de un ERTE

La situación de los trabajadores en España ha cambiado drásticamente en los últimos años, especialmente debido a la crisis económica y situaciones excepcionales como la pandemia. Los ERTE (Expedientes de Regulación Temporal de Empleo) han afectado a millones de empleados, llevando a muchos a una suspensión temporal de sus contratos. Si te has reincorporado recientemente tras un ERTE, es crucial que estés informado sobre cómo esto puede impactar en tu vida laboral y financiera. Aquí te ofrecemos una guía completa con aspectos importantes que debes tener en cuenta.

Cálculo de vacaciones y pagas extra tras el ERTE

Para quienes han estado en un ERTE, es importante entender que durante el periodo de suspensión del contrato no se generan derechos a vacaciones. Normalmente, se acumulan aproximadamente dos días y medio de vacaciones por cada mes trabajado, lo que equivale a unas cuatro semanas y media al año. Sin embargo, si has estado en ERTE durante dos meses, por ejemplo, deberás restar esos cinco días a tu total de vacaciones acumuladas.

Las pagas extras también se ven afectadas. Al estar en ERTE, no recibirás el monto total correspondiente a estas pagas, sino que recibirás solo la parte proporcional al tiempo que has estado trabajando bajo contrato activo. Esto puede ser un factor a considerar en tu planificación financiera.

Implicaciones fiscales: la declaración de la renta del 2021

Una de las preocupaciones tras una reincorporación es la declaración de la renta del próximo año. Muchos trabajadores se enfrentarán a la obligación de presentar su declaración, especialmente aquellos que han tenido diferentes pagadores durante el ejercicio fiscal, como la empresa y el SEPE durante el ERTE.

Por ley, si tus ingresos superan los 14.000 euros y has tenido dos pagadores, será necesario presentar la declaración. Sin embargo, esto no significa que automáticamente debas pagar una cantidad elevada. El IRPF se calcula considerando tus ingresos y las deducciones a las que puedes acceder, como hijos a cargo o hipotecas.

Un aspecto a tener en cuenta es que, durante el tiempo que has estado en ERTE, las empresas normalmente retendrán menos IRPF, ya que no habrán pagado tu salario completo. Por lo tanto, es posible que al regularizar tu situación fiscal, te encuentres con una declaración que resulte en un pago inesperado. Para evitar sorpresas, puedes solicitar a tu empresa un aumento en la retención de IRPF para cubrir esta eventualidad.

Consejos para una reincorporación efectiva tras un ERTE

Reincorporarse al trabajo después de un ERTE puede ser un proceso desafiante, y es normal que necesites un periodo de adaptación para retomar el ritmo laboral. Aquí hay algunas recomendaciones que pueden facilitar esta transición:

• Ponte objetivos realistas: No intentes ponerte al día de inmediato; establece metas alcanzables para evitar sentirte abrumado.
• Considera tus desplazamientos: Si utilizas transporte público, verifica si tu empresa ofrece facilidades como escalonar horarios para evitar aglomeraciones.
• Explora opciones de teletrabajo: Si es posible, considera trabajar desde casa al menos algunos días a la semana.
• Cuida tu ambiente de trabajo: Asegúrate de que tu espacio sea cómodo, iluminado y silencioso.
• Haz pausas regulares: Es fundamental descansar para mantener la productividad y cuidar tu salud mental.

Protocolos de seguridad y salud laboral

La seguridad es primordial, especialmente en el contexto actual. Las empresas están obligadas a seguir los protocolos establecidos por las autoridades sanitarias. Esto incluye garantizar que todos los empleados tengan acceso a material de protección, como mascarillas y geles desinfectantes.

Además, se deben implementar medidas para asegurar la distancia interpersonal en áreas comunes y en los accesos al lugar de trabajo. En caso de que un trabajador dé positivo por COVID-19, es esencial contar con un protocolo de actuación claro que proteja a otros empleados y minimice la propagación del virus.

Consecuencias de no aceptar un ERTE

No aceptar un ERTE puede tener repercusiones significativas para un trabajador. En primer lugar, es crucial entender que al no aceptar la suspensión, podrías enfrentarte a un despido, lo que implicaría mayores complicaciones laborales y financieras.

Además, es posible que no se te ofrezca una nueva oportunidad en la empresa si decides rechazar el ERTE. Por lo tanto, es fundamental evaluar cuidadosamente las implicaciones de tu decisión y considerar las opciones que puedan estar disponibles para ti.

Proceso y tiempos de aceptación de un ERTE

La aceptación de un ERTE suele ser un proceso que puede variar en duración. En general, se establece un plazo específico para que los trabajadores acepten o rechacen la medida. Este tiempo es crucial, ya que afecta tanto a la empresa como a los empleados.

Si bien cada caso es único, es recomendable que los trabajadores se mantengan informados sobre los plazos y condiciones de su ERTE, así como los derechos que les asisten durante este periodo. Estar al tanto de tus derechos laborales te permitirá tomar decisiones más informadas y proteger tu bienestar laboral.

Si deseas profundizar más en el tema de los ERTE, te sugerimos consultar el siguiente video que explica en detalle qué son los ERTE y su funcionamiento: